sábado, 22 de octubre de 2011

Gaby: SUEÑO MALEVO

Por Eduardo Giorlandini (2006)

El epíteto que la define es "La Voz Sensual del Tango". Grabó tres discos: "Tangos a mi Manera", "Look Tango" y "La Fama es Puro Cuento"; este último con Calígula y Francisco Llanos. Varias de sus imágenes aparecen en la gráfica de dichos compactos, en los medios televisivos y hemerográficos.
Recientemente, la revista "La Milonga Argentina", le hizo un reportaje y a la vez informa sobre su protagonismo: 
Con presencia innovadora, por causa de su vestuario, ha interpretado tangos tradicionales y antiguos, sin desdeñar los contemporáneos. Actualmente tiene 21 años de edad y gusta del género tanguista desde su niñez. Se le asigna una "imagen muy seductora" y se afirma que "sueña con llegar al corazón y emocionar a la gente". Ha participado de los ciclos "Copetínd e tango", por canal 26, y "Casino Tango Show", por Canal Sólo Tango.
En dicha entrevista expresa esta cancionista que interpreta algunos temas olvidados y que intenta desacartonar la imagen que suelen tener algunos artistas del tango; gusta de temas fuertes pero prefiere más los que despiertan sentimientos con los que está identificada por sus propias experiencias de vida, tratando de hacer algo distinto a lo convencional, intentando ser reconocida dentro de la Argentina y no en el exterior, por lo cual sus shows nno son "for export".
De sus grabaciones elegí para el presente comentario el tango Sueño Malevo, con laetra de Abel Aznar y música de León Lipesker que, en este tema usó el seudónimo de Riel. Aznar fue también compositor. Como letrista, Osvaldo Pugliese, que se caracterizó por sustentar una línea de tango compadre, le observó que: "Escribiendo así, usted no va a ninguna parte", escribía tangos poéticos alejados de lo popular, reconociendo la razón de Pugliese.
Este tango nos empujó a hacer algunos comentarios acerca del arrabal, del malevo, del guapo, del percal, que se menciona en la letra, el barbijo, el taita, el farolito, y otros vocablos como avería, faca o puñal, según Gobello, como casi siempre.
Pero ahora, ubiquémonos tomando un tiempo pasado y los comienzos del siglo XX y una circunstancia geográfica de la periferia porteña, para identificar al malevo, en este tango que es Sueño Malevo.
Nos imaginamos un barrio de ranchitos iguales, de calles de tierra, de carruajes y cuarteadores, de boliches y almacenes esquineros, sucesores de la pulpería -en casos-; del empedrado moderno incipiente, que fue signo de progreso. De tanto en tanto el farolito triste, las pibas de trenzas y percal.
Y en ese contorno los personajes de carne y hueso, a los que alude el autor de la letra, tipos distintos, que no se pueden definir con los mismos rasgos, a pesar de ostentar algunos caracteres parecidos. En esa tipología ubicamos al malevo.
El pueblo, que es el que agranda y hace el idioma, en parte los identifica por igual a todos esos personajes.
Pero malevo deriva del castellano malévolo.  Aquí le quitamos la última sílaba. Para la Academia Española, es el mal intencionado, el inclinado a hacer el mal; según la Academia Española, para nosotros es un malhechor, un matón, según el concepto de ésta. Pero para las fuentes lunfardas, argentinas en consecuencia, significa "maleante", "matón", "pendenciero", "valentón"; sujeto de avería, es decir de choque; guapo, taita, compadrito; vive en las orillas, esto es, se trata de un orillero -aunque no todos los orilleros con malevos; tiene hábitos vulgares; de malos antecedentes, degradado moralmente, de dudosos principios; es diestro en el manejo de las armas faca o facón o puñal, provocador, mantiene contacto permanente con la mala vida, es licencioso y libertino. Puede tener la melena recortada o no:

"Sos un malevo sin lengue,
sin patria ni compadrada,
sin melena recortada,
sin milonga y sin canyengue.
Al elemento bacán
batiste reo y chamuyo...
¡Lindo parlante el tuyo
pa volcarlo en un gotán!"

En otros versos, este tango, que es El malevo (letra de Martín Castro y música de Julio De Caro), se mencionan otros rasgos:

"Entre guapos de acción, copaste la cabán
te sobra corazón: sos un orre pur-sang"

 En su forma de vestir no es distinto al guapo, o al matón, o al compadre. Pero en ocasiones usa chambergo de ala fainá, es decir un chambergo de forma redonda, como una luna. Lengue y zarzo tuvieron cabida en su indumentaria.
Otras aristas de este tipo social, muy importantes, las puntualizó Enrique Ricardo Del Valle, a saber, citando fuentes:
Los malevos constituyen un grupo humano de carácter marginal. El malevo es un resentido. En su desplante excesivo se agazapa un trauma psíquico y una protesta social. Desdeña al aristocrático jaileife que lleva galera y gasta yugullo, al susheta contemuse lleno de berretines, al chitrulo sin experiencia en la carpeta o en el truco con el bramaje, al pituco afeminado, al chantapufi, al paisano, al campesino, al payucano, al que no sabe bailar tango ni chamuya debute; es xenófono: desprecia a los tanos por lacrimosos; a los franchutes por ser amigos de la pichicata, a los gaitas por su aplicación al laburo, a todos los extranjeros rantifusos. Empero, como en este tango, en su declinación, tiene nostalgia y hasta puede llorar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario