martes, 30 de agosto de 2011

EDUARDO GIORLANDINI EN INAUGURACIÓN DE MONUMENTO A GARDEL

Bahía Blanca, 24 de junio de 2011

Sonriente, levemente inclinado sobre la espalda y ocupando uno de los bordes del banco de hierro y madera, la figura del cantor Carlos Gardel es parte desde hoy del paisaje urbano de la primera cuadra de calle O'Higgins, a pocos metros del histórico y centenario hotel Muñiz donde se alojara Carlos Gardel  en ocasión de sus últimas actuaciones en nuestra ciudad.
La obra formo parte de un emprendimiento impulsado por el empresario de espectáculos José Valle y fue realizada por el artista Guido Llordi utilizando resina y fibra de vidrio. "Estamos concretando homenajes por los 121 años del nacimiento de Gardel con la idea de ubicar su estatua en varias ciudades. Elegimos a Bahía Blanca para comenzar porque la considero la capital provincial del tango", explicó Valle.
Esa calificación deriva de la gran cantidad de espectáculos de tango que alberga la ciudad durante el año, así como el haber sido cuna de artistas como Juan Carlos Cobián, Carlos di Sarli, Francisco Amor, Augusto Pedro Berto, juan Carlos Marambio Catan  y Roberto Achával, entre otros.
Carlos Gardel actuó en Bahía Blanca en cuatro oportunidades. Integrando el dúo con José Razzano lo hizo en 1918 y 1924 en el Teatro Municipal y en el Palace Theatre (Brown 162); y como solista en 1930 y 1933, en la sala del Palacio del Cine (Chiclana 174). Existen versiones que lo ubican visitando la ciudad en otras dos ocasiones, aunque por razones ajenas a su 
calidad de artista.
Realizando una breve reseña de las visitas del zorzal a la localidad bahiense, Eduardo Giorlandini participó de la ceremonia frente a la gran cantidad de vecinos que se acercaron la mañana del 24 de junio para presenciar el descubrimiento de la estatua que evoca la figura de Gardel.

El Centro de Estudios de los Intereses Nacionales (CEIN) distinguió a varias personalidades de la cultura local, a Alberto Podestá y a la Academia Porteña del Lunfardo con estatuillas realizadas por el artesano bonaerense Celso Biondo,, distinción que fue recibida por el Dr. Eduardo Giorlandini en representación de la entidad.


 Por la noche el Histórico Teatro Municipal de Bahía Blanca presento un lleno total, para disfrutar de un espectacular show de tango que dio comienzo con la actuación de Gaby “La voz sensual del tango”. La morocha Bahiense hizo gala de su magnífica voz, sin duda una de las más dulces, consiguiendo transmitir todo un cúmulo de sensaciones impresionantes con un peculiar fraseo cargado de gran profundidad, tanto de contenido como de sentimientos. Es de destacar la gran actuación de los bailarines Jesús Velázquez y Mariana Castro y de los bahienses Gustavo y Natalia. El espectáculo continuó con una serie de interpretaciones magistrales de Luis Filipelli “un cantor con perfume de glicinas” que al escucharlo nos retrotrae a Raul Berón, Angel Vargas, Luis Cardei, un lujo para nuestros oídos. El cierre musical estuvo a cargo del mítico Alberto Podestá, una leyenda del Tango Cantado que emocionó con su interpretación del Bazar de los Juguetes... una lágrima rozaba nuestras mejillas y el corazón herido palpitando en rauda galopada... el público de pie lo ovaciono en cada tema.
Antes de que el telón cubriera el escenario, el Dr. Eduardo Giorlandini se integró a una simulada mesa de café donde Podestá y Filipelli intercambiaban anécdotas del pasado, dándole calidez a la noche, además de una cercanía y complicidad con el público poco habituales.
Noche de gala, de reencuentros y de promesas, revestida con el marchamo de la sensualidad y del buen gusto, de la tradición y en especial de la tan añorada camaradería, donde no hubo sosiego para el espíritu al someterlo a esa suerte de láudano que todo lo suaviza, matiza e iguala como es la música con mayúsculas.
 José Valle (productor del evento), Alberto Podestá (cantante), Gaby "La voz sensual del tango" y Eduardo Giorlandini.
Alberto Podestá y Edaurdo Giorlandini


Jesús Velázquez, Mariana Castro, Alberto Podestá, Gaby "La voz sensual del tango" y Eduardo Giorlandini.

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